Carla Iglesias
Aqua Aura
En esta nueva entrega de chacras y minerales, en que contamos con el apoyo del conocimiento de la experta en aromaterapia Sonia Lorenzo Suárez para guiarnos con los aceites esenciales combinados con los minerales, nos referiremos a cómo podemos equilibrar nuestro tercer chacra.
Como ya entendemos que los minerales y los aceites esenciales se complementan perfectamente, trabajaremos con piedras de color amarillo y dorado, como el citrino, el ojo de tigre y la piedra sol.
En las piedras del tercer chacra, llamado Manipura, encontraremos la fuerza necesaria para trabajar nuestro sol interior, como también nuestra fuerza de voluntad, nuestras ganas de realizar y materializar nuestros proyectos y el equilibrio de todos los órganos digestivos a nivel físico y dmocional.
El tercer chacra se puede localizar fácilmente en el cuerpo cuando encontramos nuestra línea de la cintura. Existe cierta confusión cuando lo situamos centrándonos en nuestro ombligo ya que esta cicatriz de nacimiento en cada cuerpo se ubica de una forma distinta.
Cuando ponemos las manos en la cintura sabemos exactamente dónde está nuestra línea central para percibir que en el centro de la misma está el tercer chacra.
Las principales piedras de color dorado y amarillo tienen propiedades muy parecidas, con particularidades especiales. El citrino, al ser un cuarzo, tiene una energía más volcada a la emoción; como cuarzo amarillo, limpia y recarga con la energía del sol nuestro plexo solar.
La piedra sol, que es un feldespato, es más densa energéticamente hablando, pero también muy eficaz cuando se trata de trabajar problemas físicos.
El ojo de tigre también ayuda a trabajar nuestra fuerza de voluntad y nos acerca a emociones que no queremos trabajar por miedo a no saber controlar su energía.
Aceite de limón
Las piedras llamadas solares deben ser colocadas en el tercer chacra después de limpias y cargadas al sol (ver artículo revista Tú Mismo de enero de 2019); a la hora de acompañar el trabajo con un aceite esencial utilizaremos el aceite de limón (Citrus limonum).
Este aceite es fotosensible, con lo cual debemos tener muchísimo cuidado con la luz del sol para no mancharnos la piel.
Se recomienda hacer un trabajo de meditación por las noches antes de dormir, utilizando siempre un aceite vegetal como vehículo, por ejemplo, de sésamo o de almendra.
Con dos gotas nos frotamos las manos y hacemos un masaje en toda la tripa. También olemos el aceite de limón y colocamos en el tercer chacra la piedra amarilla elegida.
Las meditaciones pueden ser dirigidas con una visualización o simplemente dejamos actuar el mineral y el aceite esencial sumergiéndonos en una profunda meditación y dejando la mente en blanco y el cuerpo relajado durante 10 minutos.
Con esta práctica conseguiremos reforzar el tercer chacra, de manera que poco a poco nos vayamos sintiendo más fuertes, más confiados en nosotros mismos y ayudando a que nuestra alegría interior guíe nuestras emociones.
Seguiremos respondiendo vuestras dudas en el correo electrónico carlaisanf42@gmail.com
En junio estará en Valencia Sonia Lorenzo Suárez para ofrecer su curso de aceites esenciales, para lo cual podéis recibir más información en Aqua Aura, o a través del teléfono 963524854.
